La Esclerosis Múltiple (EM) es una enfermedad crónica y autoinmunitaria que afecta al cerebro y a la médula espinal. Es importante destacar que el gobierno de Nicolás Romero ha emitido un recordatorio a la población sobre esta condición, con el objetivo de aumentar la conciencia y el conocimiento acerca de la EM. Aunque afecta a personas de ambos sexos, es más común en mujeres y suele diagnosticarse entre los 20 y 40 años. En este artículo, exploraremos los síntomas característicos de la EM y su impacto en quienes la padecen.
Síntomas de la Esclerosis Múltiple: La Esclerosis Múltiple se caracteriza por una amplia variedad de síntomas, que pueden variar en severidad y presentación en cada persona. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- Fatiga extrema: La fatiga es uno de los síntomas más debilitantes de la EM. Las personas afectadas pueden experimentar una sensación de agotamiento constante, incluso después de un descanso adecuado.
- Problemas de movilidad: Los trastornos de la movilidad son frecuentes en la EM. Estos pueden incluir dificultades para caminar, falta de coordinación, debilidad muscular y espasmos involuntarios.
- Problemas de equilibrio y coordinación: La EM puede afectar el equilibrio y la coordinación, lo que puede resultar en dificultades para realizar tareas simples como escribir o comer.
- Alteraciones sensoriales: Los síntomas sensoriales son comunes en la EM y pueden incluir entumecimiento o debilidad en las extremidades, cambios en la sensibilidad al tacto, al calor o al frío, así como dolor o picazón inexplicables.
- Problemas visuales: La visión borrosa, la visión doble o la pérdida parcial de la visión pueden ser síntomas de la EM. Estos problemas pueden ser transitorios o prolongados, dependiendo del curso de la enfermedad.
- Problemas cognitivos: Algunas personas con EM experimentan dificultades cognitivas, como problemas de memoria, dificultad para concentrarse, disminución de la velocidad de procesamiento de la información y dificultades en la resolución de problemas.
- Trastornos del habla y la deglución: La EM puede afectar los músculos utilizados para hablar y tragar, lo que puede ocasionar dificultades para comunicarse y tragar adecuadamente.
Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden manifestarse de manera individual o en combinación, y su gravedad puede variar de una persona a otra. La EM es una enfermedad impredecible y su curso puede ser variable, con períodos de brotes o recaídas seguidos de períodos de remisión parcial o completa.