El gobernador republicano de Montana, Greg Gianforte, ha firmado una ley que prohíbe el uso de la popular aplicación china TikTok, convirtiéndose así en el primer estado de Estados Unidos en restringir esta plataforma social.
La medida tiene como objetivo proteger los datos privados y personales de los residentes de Montana del Partido Comunista Chino, según afirmó Gianforte en su cuenta de Twitter.
El Congreso estatal de Montana aprobó el mes pasado un proyecto de ley destinado a prohibir la aplicación en los dispositivos móviles de todos sus habitantes. Esta restricción va más allá del veto implementado por el Gobierno federal y la mitad de los estados del país, que prohíbe a los funcionarios públicos tener TikTok en sus celulares.
Varios sectores, incluido el FBI, miembros del Congreso y autoridades estatales, han expresado preocupación sobre la posibilidad de que TikTok pueda ser utilizada por el gobierno chino para labores de espionaje, debido a que la aplicación es propiedad de la empresa china ByteDance. China tiene leyes en materia de seguridad que podrían requerir a las compañías tecnológicas compartir datos con los servicios de inteligencia, lo que ha generado inquietud en cuanto a la protección de la privacidad de los usuarios.
No obstante, TikTok y otras empresas argumentan que estas preocupaciones son infundadas y que han implementado varias medidas para proteger los datos de sus usuarios.
En marzo, medios estadounidenses informaron que el Gobierno de Joe Biden había amenazado a ByteDance con prohibir la red social en todo el país si no vendían las acciones que poseían en la popular aplicación.
TikTok cuenta con aproximadamente 100 millones de usuarios en Estados Unidos y se ha convertido rápidamente en una de las redes sociales más populares del mundo, especialmente entre los adolescentes. A pesar de su creciente popularidad, la aplicación ha enfrentado diversas críticas y preocupaciones en relación a la seguridad de los datos y su relación con el gobierno chino. La prohibición de Montana representa la medida más drástica hasta la fecha adoptada por un territorio de Estados Unidos en relación a TikTok.