1.- Un amigo cada vez más inteligente
Los perros han evolucionado y desarrollado su inteligencia gracias a su convivencia con los humanos. Los humanos han criado selectivamente a los perros para realizar diferentes tareas y los han expuesto a un ambiente en el que pueden interactuar y aprender de nosotros. Como resultado, los perros han desarrollado habilidades impresionantes, como la capacidad de interpretar nuestras emociones, seguir comandos complejos y resolver problemas simples. De hecho, los perros tienen un nivel de inteligencia comparable al de un niño de dos años.
Además, los perros tienen una memoria a largo plazo, pueden reconocer a las personas y otros animales, y aprender nuevas tareas con facilidad. Los perros también pueden sentir empatía y utilizar la comunicación no verbal para expresar sus sentimientos y necesidades.
En resumen, la convivencia con los humanos ha tenido un gran impacto en el desarrollo cognitivo de los perros, lo que se ve reflejado en su capacidad para entender y comunicarse con nosotros. Los perros son sorprendentes en cuanto a su inteligencia y su capacidad para adaptarse y aprender en un ambiente cambiante.
2.-Tu perro no te echa de menos
La memoria de los perros es limitada en el corto plazo. Cuando te vas de casa, si no le dices nada al perro, lo más probable es que no se dé cuenta y después de unos minutos no recordará que no estás. ¿Por qué se olvidan tan rápido? No es que no te quieran, pero los perros se centran en el presente. Un perro puede sentir tu ausencia cuando te vas, pero no piensan en ello una vez que te has ido, ni tratan de entender por qué te fuiste o cuándo volverás, como hacemos los humanos.
3.-Tu perro sabe qué hora es
Los perros tienen una habilidad innata para reconocer patrones sonoros, olfativos y térmicos que les ayudan a saber qué momento del día es, aunque no tengan reloj. Ellos prestan atención a las cosas que ocurren siempre a la misma hora, como el sonido de la alarma o el momento en que te lavas los dientes, y así aprenden a identificar lo que se repite y lo que no. De esta manera, pueden saber cuánto falta para que anochezca o para que llegues a casa.
4.-Saben qué sientes
Los perros pueden saber cómo te sientes observando cómo te comportas. Si lloras, sudas, bostezas o ríes, ellos pueden entender que algo te está afectando emocionalmente. No lo hacen solo porque te quieren, sino porque están programados para leer el lenguaje corporal de su grupo y asegurarse de que todos estén en su mejor momento para enfrentar cualquier situación de peligro o caza. Por lo tanto, si tu perro te ve cansado o triste, tratará de animarte para que puedas estar preparado para cualquier cosa que pueda pasar.
5.-Los perros sí sudan, pero solo en dos zonas
Es muy raro que veas a un perro sudando, ya que su piel está cubierta de pelo y no tienen glándulas sudoríparas. Pero cuando tienen mucho calor, los perros sí sudan para mantenerse frescos y evitar lastimarse las patas al caminar sobre superficies calientes como el asfalto. La forma en que sudan es humedeciendo partes de su cuerpo como las almohadillas de las patas y la punta de la nariz
6.-Los perros también usan sus bigotes
Los perros también tienen bigotes, aunque no sean tan famosos por ellos como los gatos. En algunos perros, los bigotes pueden parecer simplemente pelos más gruesos, pero son muy importantes para ellos porque les ayudan a ver en la oscuridad. Nunca debes cortar los bigotes de tu perro porque los usan para medir las distancias y evitar chocarse contra cosas cuando no pueden ver bien. En la oscuridad, los perros confían mucho en sus bigotes para no tropezar o chocarse.
7.-Su edad es relativa
Cuando comparamos la edad de un perro con la de un humano, solemos decir que cada año de perro equivale a siete años de humano. Pero en realidad, esto es solo para tener una idea de su esperanza de vida. Los perros maduran a un ritmo y de una manera diferente a los humanos. Desde muy temprana edad, los perros son capaces de cuidar de sí mismos y de buscar alimento, a diferencia de los niños humanos. A los 12 meses de edad, un perro ya tendría habilidades equivalentes a un adolescente humano de 15 años.
8.-Imita tu bostezo para defenderse
Si observas con atención, es posible que hayas notado que cuando tú bostezas, tu perro también lo hace, especialmente si están en un lugar desconocido. Esto es un instinto que algunos mamíferos tienen, ya que el bostezo les ayuda a oxigenar el cerebro en situaciones de peligro
9.-Tu perro también sueña
Se ha demostrado que los perros son capaces de tener sueños, especialmente durante la fase de sueño REM, donde experimentan movimientos oculares rápidos y una actividad cerebral similar a la de los seres humanos. Durante el sueño, los perros pueden mover las patas