• Son malos hábitos de vida, factores condicionantes para desarrollar problemas de obesidad.
• Repercute también el estado emocional de los infantes.
Toluca, Estado de México, 20 de abril de 2023. La obesidad y el sobrepeso infantil se han incrementado en los últimos años. De acuerdo con datos recientes de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), ambas condiciones ocupan el primer lugar a nivel mundial, con una estadística del 37 por ciento en pequeños de cinco a 11 años.
Al respecto, nutriólogos especialistas del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) refieren que la causa principal de estos padecimientos es el desequilibrio energético con la ingesta de alimentos altos en grasas y azúcares principalmente, además del sedentarismo y los malos hábitos de sueño.
Actualmente, las nuevas tecnologías han sido un parteaguas para que desde pequeños estén sentados frente a algún dispositivo sin alguna actividad física, hoy en día vemos a los niños la mayor parte del tiempo dentro de sus casas con un aparato electrónico en lugar de acudir a parques o lugares recreativos a jugar, señalaron.
Asimismo, indicaron que la falta de higiene del sueño es un precursor importante para que los niños desarrollen malos hábitos y aumenten los riesgos de obesidad infantil, esto de acuerdo con la American Academy of Pediatrics: “La reducción constante del sueño tiene conexión con las tasas altas de obesidad en niños de siete años”.
De igual manera, destacaron que se ha detectado que el estado emocional de los menores representa un factor coadyuvante en la presencia de estos desequilibrios, por ejemplo, manifestaciones de ansiedad, estados de depresión, reflejo conductual y actitudinal de baja autoestima y problemas sociales como el bullying, son condiciones que redundan en la obesidad infantil o que pueden llegar hasta el suicidio.
Es importante mencionar que los primeros años de vida del infante son vitales para establecer hábitos alimenticios saludables y reducir enfermedades durante su desarrollo, evitando así diabetes tipo 2 e hipertensión, las cuales se pueden presentar durante la juventud o madurez.