El día de hoy, usuarios de redes sociales reportaron el cierre del puente internacional Paso del Norte-Santa Fe por parte de los agentes de la CBP (Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza) ante la presencia de un grupo de migrantes de distintas nacionalidades sobre la avenida Juárez.
Los migrantes mencionan que fueron convocados a través de redes sociales porque Estados Unidos les abriría la frontera hoy, pero al llegar al puente se encontraron con la negativa de los agentes de la CBP para permitirles el paso.
Este tipo de situaciones son cada vez más comunes en la frontera entre México y Estados Unidos, donde miles de personas migrantes buscan diariamente la manera de cruzar para mejorar su calidad de vida. Sin embargo, la realidad es que las políticas migratorias en la región se han vuelto cada vez más restrictivas, lo que ha generado una crisis humanitaria que afecta a miles de personas.
Si bien es necesario regular y controlar el flujo migratorio, se debe hacer de manera justa y humana, respetando los derechos de las personas migrantes y proporcionándoles las garantías necesarias para una vida digna.
Es fundamental que los gobiernos de México y Estados Unidos trabajen de manera coordinada para establecer políticas migratorias que fomenten la seguridad y el bienestar de todas las personas involucradas, así como el respeto a los derechos humanos.