En el marco del Día Internacional de las Personas Trabajadoras del Hogar, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha hecho un llamado al Estado Mexicano para que promueva y defienda los derechos económicos, sociales y culturales de las trabajadoras domésticas, quienes realizan una labor fundamental en los hogares y comunidades de nuestro país.
La CNDH reconoce los avances en la protección de los derechos laborales de estas personas, como su incorporación al Instituto Mexicano del Seguro Social, pero es consciente de la falta de políticas públicas que dificultan el acceso a condiciones laborales dignas y seguras, así como a sueldos justos que correspondan con la importante labor que realizan. Por ello, hace un llamado a las autoridades para que realicen acciones que garanticen los derechos de las trabajadoras del hogar.
Además, la Comisión hace un llamado respetuoso a la sociedad en su conjunto, principalmente a quienes contratan los servicios de las personas trabajadoras del hogar y partes involucradas, para que se sumen a la lucha por la protección de los derechos humanos de este sector laboral y para garantizar su seguridad y trato digno en los entornos familiares y sociales. Es importante que se implementen medidas como el establecimiento de contratos laborales y la afiliación a la seguridad social para que puedan ejercer sus derechos sociales y económicos y el bienestar de sus propias familias.
Es necesario reconocer la contribución de las personas trabajadoras del hogar para la cohesión social y la vida digna de todas las personas, y garantizar que tengan acceso a condiciones laborales justas y equitativas, protección social y acceso a servicios básicos de salud y educación. En muchos casos, estas personas sufren de discriminación y violaciones de sus derechos humanos, lo que incrementa su vulnerabilidad, especialmente aquellas que son mujeres migrantes, indígenas o pertenecen a otros grupos en situación de vulnerabilidad.