Los cárteles del narcotráfico que operan en Nuevo Laredo y Matamoros, Tamaulipas, deben ser desmantelados debido al amplio poder que ejercen, según afirmó el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, en una conferencia de prensa en la capital del país.
Además, el diplomático declaró que Estados Unidos no descansará hasta juzgar a los culpables de la muerte de dos ciudadanos estadounidenses en Matamoros y acordó con México fortalecer, “de manera operativa, de recursos”, el esfuerzo contra el fentanilo y contra la delincuencia que afecta a ambos países.
Salazar dijo que el desmantelamiento de los cárteles en Tamaulipas “lo tenemos que hacer en conjunto con el gobierno mexicano, respetando la soberanía de México”. Explicó que Estados Unidos cuenta con consulados en Matamoros y Nuevo Laredo, pero “el pueblo” vive con “mucho miedo”.
El embajador subrayó entonces la importancia de desmantelar estos cárteles que tienen tanto poder en esa zona y dijo que este trabajo debe hacerse en conjunto con el gobierno mexicano, respetando la soberanía de México.
Salazar detalló los alcances de la reunión entre funcionarios de seguridad de la Casa Blanca enviados el miércoles a la Ciudad de México para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador, así como con el canciller Marcelo Ebrard y los secretarios de seguridad.
El embajador explicó que el presidente Joe Biden creó un área en la Casa Blanca encargada de atender el tema del tráfico del fentanilo, una droga que según Estados Unidos mató a más de 100 mil personas en ese país el año pasado.
Uno de los acuerdos, dijo el representante estadounidense, es el impulso a una campaña de información, en México y Estados Unidos, sobre los riesgos del consumo de fentanilo.
Otro punto es el fortalecimiento de los esfuerzos de los equipos y las agencias de seguridad de Estados Unidos con el gobierno mexicano para enfrentar esta delincuencia, porque es un problema de las dos naciones.
“Lo hacemos como socios”, de manera diferente a como se hacía en gobiernos anteriores, dijo Ken Salazar.