- No vamos a permitir que se vulneren o se desprecien nuestros derechos políticos
- Exigimos a los legisladores y al Presidente de la República una revisión urgente
Desde 1994, los pueblos originarios de México, entre otros, lanzamos el grito: “Jamás un México sin nosotros”, ya que somos quienes proporcionamos la identidad cultural, cuidamos la biodiversidad y proveemos a todos en este país los alimentos que se cultivan en nuestros territorios.
El Plan B de la Reforma Electoral, que fue aprobado la semana antepasada en el Senado, y cuyo decreto publicará en breve el Presidente de la República, representa para nosotros un acto de discriminación sin precedentes, sentenció Candelaria Lázaro Lázaro, Gobernadora del Gobierno Nacional Indígena de México (GNIM).
La reforma electoral es una regresión a lo que desde 2017 diversos grupos de pueblos indígenas, afromexicanos y migrantes, avanzamos logrando participación de candidatos a diputaciones plurinominales federales en representación de nuestras comunidades e intereses, dijo Candelaria al participar como invitada durante un evento realizado por el Frente Cívico Nacional en Tabasco.
La reforma impide que sigamos avanzando en dichas acciones positivas, cuya naturaleza es lograr un estatus de igualdad en condiciones para grupos vulnerables, pero esta reforma las frena definitivamente, añadió.
Explicó que la reforma considera a 6 grupos en situación de vulnerabilidad, entre los que nos encontramos los indígenas. Y permite a 25 personas el derecho a ser diputados representantes de uno o de alguno de los grupos
vulnerables. Veinticinco personas que bien podrían pertenecer a uno o varios de esos grupos (mujeres, jóvenes, LGTBQ+, discapacitados, indígenas o migrantes). Si posteriormente por cualquier razón existiera otro colectivo vulnerable no tendría derecho a esa cuota y bien podría darse el caso de que ninguno de esos 25 fuera indígena, sin que se violara la ley.
Por otro lado, la cuota no contempla la representación de indígenas en el senado de la República.
A los que pretendan presentarse como indígenas se les permite hacerlo por el simple hecho de auto-adscribirse como tal, sin mayor requisito, dejando a los partidos, como ya lo intentaron en las pasadas elecciones, en la libertad de presentar candidatos sin ningún vínculo con una comunidad originaria.
Es una forma, indicó, totalmente discriminatoria, pues para ser diputado indígena, se impone el requisito de presentarse por un distrito considerado indígena por la autoridad electoral, requisito que no pide a ningún otro colectivo vulnerable. Esta es una medida muy grave, puesto que a los indígenas solo se nos permitiría ejercer nuestro derecho político a ser representantes de nuestras comunidades dentro de distritos considerados indígenas, dejando fuera de la participación a la mayoría de las comunidades de los pueblos originarios que no cumplen con dicho criterio sólo por densidad poblacional.
Por razones políticas que podemos entender, la reforma se hizo con urgencia y sin contemplar el estudio y consultas necesarias que impone el proceso legislativo, y es posible que el olvido y discriminación que se hace en contra de la población originaria de este país no se haya advertido o lo que podría ser más grave: se haya calculado como irrelevante.
Los miembros de los pueblos indígenas de este país no vamos a permitir que se vulneren o se desprecien nuestros derechos políticos por la razón que sea, llevamos muchos siglos de lucha para ser tratados ahora como ciudadanos de segunda, afirmó la gobernadora.
Por lo que exigimos a los legisladores y al presidente de la República una revisión urgente de este punto, para que los indígenas tengan voz y voto como representantes populares, finalizó.