El caso de Pablo Lyle es uno de los más notorios en la historia reciente de justicia en México y Estados Unidos. Pablo Lyle, un actor y modelo mexicano radicado en Miami, Florida, se encontró en el ojo público después de ser arrestado y acusado de homicidio en marzo de 2019.
El incidente ocurrió cuando Lyle y su familia estaban viajando en un auto y se encontraron en un altercado con otro conductor en la carretera. Según los informes, Lyle golpeó al otro conductor, identificado como Juan Ricardo Hernández, durante la disputa. Hernández sufrió lesiones cerebrales y murió poco después.
Lyle fue arrestado y acusado de homicidio en segundo grado, y su caso ha sido objeto de un intenso debate y cobertura mediática en ambos países. Muchos han argumentado que Lyle actuó en defensa propia y de su familia, mientras que otros creen que sus acciones fueron excesivas y que debió ser considerado responsable de las consecuencias de sus acciones.
En septiembre de 2019, Lyle fue declarado no culpable de homicidio en segundo grado por un jurado en Miami. Sin embargo, la familia de Hernández apeló la decisión
El actor mexicano Pablo Lyle fue sentenciado este viernes 3 de febrero de 2023 a cinco años de prisión y ocho años de libertad condicional por el homicidio involuntario de Juan Ricardo Hernández, hombre de 63 años y de origen cubano.
La audiencia, que fue emotiva y se prolongó por más de tres horas, tuvo lugar en una corte de Miami y estuvo presidida por la jueza Marisa Tinkler Méndez.
El 31 de marzo de 2019, Lyle, quien se encuentra detenido en el Centro Correccional Turner Guilford Knight (TGK) en Miami-Dade,
Lyle fue declarado culpable en octubre de 2022 y enfrentaba una sentencia de hasta 15 años en prisión, de acuerdo con la recomendación hecha por la fiscalía. Sin embargo, la jueza Tinkler Méndez decidió que la sentencia sería de cinco años de prisión y ocho años de libertad condicional, además de clases de manejo de ira y servicio comunitario. La jueza también mencionó que le contaría el tiempo que ya ha pasado en prisión.
La defensa argumentó que Lyle merecía los 15 años de prisión que recomendó, ya que nunca mostró remordimiento y trató de justificar su agresión diciendo que “sintió miedo” y que intentaba proteger a su familia. Por su parte, Lyle, esposado y con traje de preso, se disculpó ante los familiares de Hernández antes de la sentencia y dijo que no podía imaginar el dolor de alguien que pierde a un ser querido, especialmente en una situación como la ocurrida.
El actor expresó su más sincero pesar y señaló que ha aprendido una importante lección a raíz de los hechos.