De no tomarse medidas urgentes y concertadas, el cambio climático multiplicará la desigualdad y las enfermedades, y profundizará más las brechas en el desarrollo humano.
La conclusión se desprende de los datos captados por una nueva plataforma presentada por el PNUD y la organización multidisciplinaria Cllimate Impact Lab, que revelan el impacto devastador que el cambio climático puede tener en la vida de las personas.
Los organismos señalaron que la desigualdad se acentuará enormemente en la salud de la población de las distintas naciones durante las próximas décadas, y expusieron que si bien un tercio los países del G20, responsables la mayor parte de las emisiones de carbono, registrará un aumento de la mortalidad por el cambio climático, el incremento de esas muertes alcanzará a cerca del 75% de los países menos adelantados.
“Nuestros sistemas cardiovascular y respiratorio se estresan con las temperaturas cada vez más altas. Este efecto será visible en todo el mundo a medida que se siga calentando el entorno, pero su efecto será muy diferente en los lugares que cuentan con los medios para responder y adaptarse, y en los que carecen de esa capacidad”, apunta la plataforma.
La inequidad también se exacerbará dentro de los países. En Colombia, por ejemplo, la ciudad de Barranquilla, un puerto con altas emisiones en el norte del país, la tasa de mortalidad por el calentamiento de la Tierra aumentará a 37 por cada 100.000 personas para 2100, ampliando así brecha con las muertes por el mismo motivo en Bogotá, la capital. Los decesos proyectados para Barranquilla serían cinco veces mayores que la actual tasa anual de mortalidad por cáncer de seno en Colombia.
Cambio climático: efectos en la vida de las personas
Los efectos en la vida de las personas se observarán en cambios en la mortalidad, la capacidad de trabajo y el uso de la energía, detallan los organismos, citando entre las consecuencias del calentamiento del planeta un aumento notable de la incidencia del cáncer en algunos lugares del mundo.
Las agencias ilustraron esta previsión con el caso de Dhaka, la capital bengalí, donde las emisiones de gases de efecto invernadero son muy altas. En esa ciudad, las muertes adicionales debidas al cambio climático llegarían a 132 por cada 100.000 personas cada año para el 2100, duplicando los decesos por cáncer y superando diez veces los fallecimientos anuales por accidentes de tráfico.
El administrador del PNUD, Achim Steiner, recordó que ya este año, muchas comunidades en todos los rincones del planeta viven una emergencia climática con impactos mucho más rápidos y severos de lo que muchos preveían. “Esto supone una amenaza para nuestro futuro y un riesgo real que debe ser confrontado aquí y ahora”, recalcó.
La plataforma
Steiner añadió que al centrar la atención en el efecto del cambio climático sobre aspectos como la mortalidad, el trabajo y el uso de la energía, la nueva plataforma Human Climate Horizons ofrece a los responsables de formular políticas datos y análisis para ayudar a los países a ejecutar medidas climáticas donde más se necesiten.
“La plataforma muestra que, si a nivel mundial se amplían los esfuerzos por cumplir las metas del Acuerdo de París, se podría reducir en más del 80% la mortalidad prevista para el año 2100 derivada del calor extremo, y salvar así decenas de millones de vidas”, abundó el administrador del PNUD.
Los nuevos datos demuestran la necesidad de actuar con prisa, no sólo para mitigar el cambio climático, sino para adaptarse también a sus consecuencias. Según el PNUD, las proyecciones de las consecuencias del cambio climático sobre el desarrollo humano ayudan a comprender lo que pueden suponer para la vida y la seguridad humana los peligros del panorama que se cierne sobre el mundo.
El futuro se puede cambiar
“Sin embargo, debemos recordar que el futuro no está predeterminado”, enfatizó Pedro Conceição, de la Oficina del Informe sobre Desarrollo Humano, agregando que las proyecciones con localizaciones específicas que ofrece la nueva plataforma empoderan a las personas para que sean capaces de tomar decisiones, ya sea señalando la urgencia de reducir las emisiones, o evidenciando las desigualdades emergentes en el desarrollo humano. En última instancia, “pueden apoyar la acción de las comunidades, los gobiernos, las entidades aseguradoras y otros actores financieros”, argumentó.
El profesor de Políticas Públicas de la Universidad de Berkeley e integrante de Climate Impact Lab, Sol Hsiang, indicó que con análisis de datos y modelos climáticos precisos, la plataforma deja claro que los perjuicios del cambio climático recaen desproporcionadamente en las regiones más calurosas y, a menudo, más pobres, acentuando las desigualdades ya existentes.
“Afortunadamente, el mundo todavía está a tiempo de cambiar de curso mediante una agresiva reducción de las emisiones”, sostuvo Hsiang. La nueva plataforma, concebida para empoderar a las personas y a los responsables de la toma de decisiones, está disponible en inglés de manera gratuita y ofrece acceso a un campo de investigaciones en constante evolución con el propósito informar los esfuerzos para reducir los desiguales efectos del aumento en las emisiones de los gases de efecto invernadero a nivel mundial.
Fuente: ONU