La marca Tesla de Elon Musk, podría estar bajo la lupa del departamento de Justicia de EEUU debido a supuestos ‘fallos’ mortales en su sistema de conducción autónoma AutoPilot.
En estos días en los que el fundador de la marca de automóviles eléctricos toma posesión como flamante nuevo propietario de Twitter, Elon Musk se enfrenta a uno de sus mayores quebraderos de cabeza: EEUU podría estar investigando a Tesla por accidentes mortales relacionados con su sistema de conducción autónoma.
Según informaciones publicadas por Automotive News, el departamento de Justicia de Estados Unidos estaría estudiando una docena de accidentes, algunos fatales, relacionado con lo que Musk describió en 2016 como un sistema “probablemente mejor” que un conductor humano, la tecnología Tesla Autopilot: su piloto automático.
En todo este tiempo, el fabricante estadounidense de vehículos eléctricos ha confiado plenamente en ella, al considerar que “la persona en el asiento del conductor sólo está allí por razones legales. No está haciendo nada. El automóvil se conduce solo”…salvo a la hora de advertir explícitamente a esos mismos conductores que debían “mantener las manos en el volante y estar pendientes del entorno”.
Y por si fuera poco, recuerda este medio de comunicación, la semana pasada, Musk anunció que Tesla lanzaría pronto una versión mejorada del software ‘Full Self-Driving’, que permitirá a sus clientes desplazarse “a su trabajo, a la casa de su amigo, a la tienda de comestibles sin que nadie toque el volante”.
Y al mismo tiempo, en su página web, la compañía explica como tratando de curarse en salud que la tecnología de Tesla está diseñada para ayudar con la dirección, la frenada, la velocidad y los cambios de carril, pero sus características “no hacen que el vehículo sea autónomo”, algo que al parecer no ha dejado nada satisfechos a los familiares de muchos de quienes han muerto a bordo de un Tesla.
Con información de TechnoNoticias