Aun falta tiempo para decir formalmente en el expediente, no hay ninguna duda que Fernando Sabag Montiel, fue el autor intelectual del intento de asesinato de Cristina Kirchner. Personas que estuvieron en el lugar lo vieron apuntar a la cara de la Vicepresidenta, tirar el arma, y lo detuvieron militantes kirchneristas a los pocos metros cuando intentaba irse.
Lo que no esta del todo claro, es el por qué tomó esta decisión, durante estas horas la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo, a cargo de la investigación se encuentran esperando que las respuestas surjan del análisis del celular Samsung que se le quitó, que aún no se pudo abrir porque quedó bloqueado. Un dato desconcertante: apareció el mensaje “reseateado de fábrica”.
Hoy domingo 04 de septiembre, los investigadores esperaban la declaración de los técnicos que tuvieron acceso al teléfono, confían en que la información del celular pueda ser recuperada, por ahora, el teléfono sigue bloqueado.
Los investigadores pidieron las entradas y salidas de todas las llamadas que se activaron en la zona, buscan saber si Sabag Montiel habló o se reunió con alguien en los minutos previos al ataque para determinar si actuó solo o por orden o en coordinación con alguien más.
Los analistas deben determinar si los custodios debían proteger a la vicepresidenta incurrieron en un delito, al violar los deberes de cuidado. Por lo pronto, al menos cinco custodios declararon entre la madrugada y la mañana del viernes en tribunales en calidad de testigos. Eso no quiere decir que no puedan convertirse, con el correr de la investigación, en imputados.
En declaraciones periodísticas, el interventor de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Agustín Rossi, afirmó que no falló la custodia de la Vicepresidenta y reveló que desde el Gobierno no tenían “ninguna alerta” sobre Sabag Montiel. Lo definió como un “lobo solitario, alguien que por sí mismo armó todo sin demasiada logística”.