Este domingo 4 de septiembre la ciudadanía acudió en masa a las urnas para decidir sobre la propuesta de nueva Constitución emanada por la Convención Constitucional. Finalmente, los chilenos decidieron rechazar la propuesta que durante un año trabajó el órgano.
Según datos del Servicio Electoral (Servel) hasta las 20.35 horas y con un 98,43% de las mesas escrutadas a nivel nacional por un 61,90% se imponía esa opción, mientras que un 38,10% lo hizo por el Apruebo. Más de 12 millones 500 mil personas habían participado del proceso.
La jornada fue larga y estuvo marcada por una gran participación ciudadana. Desde temprano las personas comenzaron a acudir a sus locales de votación, incluso algunas llegaron antes de la apertura de mesas, esto debido al cambio de horario que inicialmente iba a ser este sábado, pero que se aplazó una semana.
El gobierno evaluó positivamente la jornada, tanto en la participación, como en el transporte público y el funcionamiento de las instituciones involucradas durante el proceso.
Por su parte, el Presidente Gabriel Boric, luego de emitir su voto en Magallanes, reiteró su llamado a que cualquiera fuese el resultado de la consulta, iba a convocar a una “amplia unidad nacional”.
“Puedo garantizar de que nuestra voluntad y nuestra acción, independiente de cual sea el resultado, será convocar a una amplia unidad nacional de todos los sectores, de las organizaciones, de la sociedad civil de los partidos políticos”, indicó.
Aproximadamente 30 minutos después del cierre de mesas se conoció, además, que el Presidente Boric convocó a todos los partidos a una reunión para este lunes en La Moneda con objeto de dar “continuidad al proceso constituyente”.
El Rechazo fue apoyado desde el principio por los partidos de oposición a Boric, sin embargo, las colectividades de Chile Vamos y Republicanos resolvieron mantenerse en una segunda, como quedó graficado en la franja televisiva espacio que fue cedido a las organizaciones de la sociedad civil y en los actos de cierre de campaña. Figuras importantes del sector, como el expresidente Sebastián Piñera y el excandidato presidencial José Antonio Kast, prácticamente mantuvieron silencio.
Sin embargo, el consenso general es que la actual Carta Magna -pese al triunfo del Rechazo- debiera continuar un proceso por cambiar la Constitución de todos modos. Así al menos lo transmitieron durante las últimas semanas colectividades de oficialismo y oposición. De hecho, el propio Presidente lo dejó en claro previo a los comicios: “Si es que gana el Rechazo vamos a tener que enfrentar un nuevo proceso constituyente, una nueva Convención, eso va a tomar por cierto más tiempo, pero el pueblo de Chile ya se definió por tener una nueva Constitución”, aseguró el pasado 20 de agosto.
La declaración del Mandatario reflejó el cambio en la postura que el gobierno adoptó desde que se entregó la propuesta de nueva Carta Magna hasta el día del plebiscito. Esto se tradujo en una serie de diálogos con diversos sectores para buscar alternativas frente al triunfo del Rechazo. En los últimos días diversos personeros del Ejecutivo dejaron en claro que el resultado de esta jornada “se respetaba” aunque la diferencia fuese de “un voto”.