Al menos 45 personas murieron y otras 113 resultaron heridas tras inundaciones y otros incidentes provocados por fuertes lluvias monzónicas en las últimas 24 horas en Pakistán, informó la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres (NDMA, siglas en inglés).
Según un informe publicado el viernes por la NDMA, la provincia meridional de Sindh fue la región más golpeada con 33 muertos y 98 heridos, seguida de la provincia noroccidental de Khyber Pakhtunkhwa, con 10 muertos y 13 heridos, y la provincia oriental de Punjab con dos fallecidos.
La ministra precisó que el país ha recibido unas precipitaciones 241 % superiores a lo normal solo en el mes de agosto, con algunas provincias como la sureña Sindh recibiendo un alarmante 784 % más.
“Se trata de la principal crisis de Pakistán en este momento (…), miles se encuentran sin hogar, muchos sin comida y aislados”, señaló. Rehman añadió que el país no puede recuperarse por sí solo de los daños causados por este “monzón monstruoso”, y pidió ayuda de la comunidad internacional. “Las lluvias sin respiro significan que no tenemos tiempo para nada más que las operaciones de rescate”, dijo.
Las autoridades paquistaníes han movilizado a las fuerzas de seguridad en las labores de salvamento, y la oficina de comunicación del Ejército paquistaní (ISPR) afirmó hoy que unas 40.000 personas han sido evacuadas.
El jefe de coordinación humanitaria de Naciones Unidas, Martin Griffiths, anunció que la organización ha movilizado tres millones de dólares para dar respuesta urgente a las inundaciones en Pakistán. “Este fondo ayudará a nuestras agencias y colaboradores a proveer asistencia a 90.000 de las personas más afectadas”, dijo.
Adicionalmente, 682.139 viviendas, 149 puentes y 122 establecimientos comerciales han sido destruidos, añadió. El primer ministro pakistaní, Shahbaz Sharif, ha pedido asistencia a la comunidad internacional para responder a la magnitud de las calamidades de las inundaciones.