La exclusividad se paga

La mayor parte de los estacionamientos exclusivos para vehículos en Saltillo, Torreón, Piedras Negras y Monclova, que tienen para sus clientes los comerciantes, así como muchos particulares, son irregulares, falsos o están fuera de la ley, pues no cuentan con la correspondiente autorización y lo peor, ni siquiera pagado el derecho municipal para gozar de ese privilegio, aunque los violadores de esta reglamentación no sólo son groseros y abusones, sino delinquen al ponchar llantas o rayar la pintura de los vehículos cuyos propietarios osan estacionarse en lo que es la vía pública y no un coto privado.

Ante esta creciente irregularidad, las autoridades del transporte municipal de los diferentes ayuntamientos coahuilenses, han demostrado durante muchas administraciones pasadas una apatía para acabar contra esos abusones y delincuentes, pues independientemente que pretenden usurpar funciones acreditándose un espacio exclusivo no pagado, son groseros y altaneros con quienes no les hacen caso de no estacionarse frente a sus negocios, pese, persistimos, a que no tienen permiso de exclusivo.

Es muy fácil detectar los espacios públicos marcados como exclusivos, y que son falsos, pues no es suficiente con pintar de amarillo, poner bollas, cajas, sillas, o la improvisación de un letrero marcado con el símbolo de “no estacionarse o prohibido estacionarse”, montado sobre un ring viejo.

Aquellos espacios legítimos de espacio con exclusividad para el estacionamiento de vehículos son suficiente con el marcado de amarillo y sobre de él pintado el folio de permiso otorgado por el ayuntamiento que consta de letras y dígitos.

El beneficio que tienen los ciudadanos que sí pagan al municipio, por cierto, muy contados, no necesitan estar vandalizando los vehículos de quienes se estacionan en los espacios exclusivos sino simplemente los reportan a las autoridades y se harán acreedores a una infracción de tránsito y en otros casos se remolcan dichas unidades para pagar no solo la multa sino la movilidad de la grúa y el corralón.

Es lamentable decir que entre el 60% y 80% de los espacios marcados como exclusivos o no estacionarse son irregulares y por lo tanto ilegítimos siendo acreedores a un castigo administrativo por parte de las autoridades locales por usurpar un exclusivo al que no tienen derecho más que únicamente pagándolo ante las autoridades locales.

Si las nuevas cabeceras municipales coahuilenses se pusieran las pilas en este rubro, representaría un ingreso directo a las arcas de los municipios, es decir, tanto las multas por usurpación de espacios exclusivos, así como regularización de la misma. Puede ser que no represente tanto dinero comparado con los recursos federales, aunque éstas sean migajas, pero de algo si estoy seguro que es un dinero que nadie se los va a dar y es estar dentro de la ley.

Por otra parte, los dueños de vehículos afectados por esta mala práctica de comerciantes que además de agresiones verbales y dañan propiedad ajena se les debe de invitar a pasar a hacer sus denuncias ante el Ministerio Público por daños y perjuicios e insultos. Bien dice el dicho popular, “el valiente vive hasta donde el cobarde quiere”, porque la única manera de quitarles lo abusones de estas personas es por medio de la denuncia.

No fomente con su silencio la prepotencia, altivez y conducta grosera de los dueños de propiedades comerciales o particulares, que indebidamente se apropian de un espacio sin pagar a las autoridades locales los espacios exclusivos, y tampoco permitir que tienen el derecho de dañar propiedad ajena por el simple hecho de pertenencia porque hasta regó el árbol de afuera.  (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México).  www.intersip.org