Las autoridades sanitarias francesas han confirmado un vínculo entre el riesgo de cáncer de colon y recto y la exposición a nitratos y nitritos, en particular los presentes en la carne procesada.
Después de meses de investigación, la Agencia Nacional de Seguridad Alimentaria de Francia (Anses) confirmó en un informe esta semana lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya había advertido en 2015, la relación de la carne procesada con el cáncer…
Esta conexión se debe a los nitratos y nitritos, compuestos utilizados en la industria charcutería para prolongar la conservación de sus productos y evitar el crecimiento de bacterias patógenas que pueden provocar enfermedades como el botulismo, la listeria o la salmonelosis.
Tras la publicación del informe, la agencia de salud francesa pidió a la población que limite su consumo de carne procesada a 150 gramos (5,2 onzas) por semana.
Esto incluye tocino, jamón cocido y ahumado, salchichas, salami y hot dogs. En las recomendaciones oficiales francesas que siguen a este informe, hay medidas importantes dirigidas particularmente a la industria de la carne procesada.
El sector está obligado a probar el uso de nitritos y nitratos “tan bajo como sea razonable” y “con la condición necesaria de tomar medidas para controlar el riesgo de contaminación por otros medios”.
Ante el riesgo de que la reducción en el uso de nitritos y nitratos pueda desencadenar la aparición de salmonelosis o listeria, la autoridad francesa recomienda aumentar la fecha límite de consumo de los productos y aumentar las medidas de bioseguridad en granjas y mataderos.
Las autoridades francesas también advirtieron que el uso de extractos de plantas por parte de algunos fabricantes como sustitutos de nitritos no es realmente una alternativa porque “contienen nitratos y nitritos ocultos”.
La autoridad francesa también pidió un cambio en algunas prácticas agrícolas, como el uso de fertilizantes y estiércol, porque contaminan las capas subterráneas cuya agua potable contiene nitratos. Más de la mitad de los nitritos consumidos por la población provienen del consumo de carnes procesadas, y dos tercios de los nitratos provienen de productos vegetales, especialmente vegetales de hojas como la espinaca.
El gobierno francés ordenará ahora nuevas investigaciones y recuerda que a finales de año se espera un dictamen europeo sobre una posible revisión de la ingesta diaria permitida de nitritos.