Múltiples grupos de anexos y Alcohólicos Anónimos se han unido para generar un movimiento social, con el objetivo de pedir al gobernador Miguel Barbosa Huerta que sean escuchados y tomados en cuenta para la iniciativa de reforma a la Ley Estatal de Salud, que presentó para regular estos centros. Su propuesta es que se conviertan en grupos de ayuda mutua.
“No todos los centros de rehabilitación son iguales”, asegura Fernando Ardavín, voluntario de la Clínica Rush, quien tomó la iniciativa de generar este movimiento social. Él considera relevante que algunos anexos en Puebla, permanezcan como Grupos de Ayuda Mutua, donde los pacientes no son agredidos.
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Cabe destacar que las organizaciones han manifestado que estas casas de rehabilitación juegan un papel importante en la transformación de miles de vidas en México, pues son un factor de cambio en Puebla.
De igual forma, se ha destacado que un sector importante de la población se ha unido a este movimiento de conservación para apoyar a quienes buscan abandonar su dependencia de las sustancias psicoactivas.
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