El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, llegó el viernes a El Salvador para hablar con su homólogo Nayib Bukele sobre temas de cooperación para disminuir la migración irregular, principalmente entre los jóvenes.
López Obrador reconoce que a los países centroamericanos y México les aquejan los mismos problemas: la pobreza, la desigualdad, la frustración del campo, la desintegración social, la marginación y la negación histórica de derechos efectivos para la mayoría.
En Guatemala, la primera escala de su gira por la región, López Obrador dijo estar convencido de que “atendiendo las causas, los orígenes de la violencia, las bandas delictivas se irán quedando sin jóvenes a los cuales reclutar y que las personas podrán vivir en sus lugares de origen sin verse obligadas migrar y que la paz social podrá hacerse una realidad”.
Durante años, México ha sido un país de origen, tránsito, destino y retorno de personas migrantes, quienes por buscar un mejor futuro para sus familias o por escapar de la violencia y pobreza, deciden salir de su país.
El mandatario mexicano visita El Salvador en medio de un estado de emergencia decretado a petición de Bukele para combatir a las pandillas, a las que responsabiliza de una ola de asesinatos registrados en los últimos días de marzo.
En su reunión con Bukele se evaluarán los proyectos Sembrado Vida y Jóvenes Construyendo Futuro. Con el primero pretende llevar empleos a través de reforestación en comunidades y así desalentar la migración. El segundo vincula a personas que no estudian ni trabajan con empresas u otros negocios para que desarrollen capacidades laborales.
El embajador de México en El Salvador, Ricardo Catú, que participó esta semana en la presentación de los resultados de la iniciativa en un populoso municipio ubicado en a la periferia norte de la capital, dijo que con Jóvenes Construyendo Futuro se benefician a unos 10.000 jóvenes a través de diversas acciones laborales.
El experto en tema de migración, Cesar Ríos, del Instituto Salvadoreños del Migrante (INSAMI), dijo a The Associated Press que espera que la visita de Lopez Obrador motive a los gobiernos de la región a desarrollar propuestas conjuntas con México para presentarlas a Estados Unidos, ya que de lo contario “vamos a continuar siendo víctimas del tema migratorio”.
Para señalar la situación de la nueva realidad migratoria, Ríos dijo que en los últimos seis meses alrededor de 50.000 salvadoreños han sido detenidos en la frontera de Estados Unidos. Se estima que al menos unos 300 salvadoreños salen todos días del país rumbo a Estados Unidos en busca del “Sueño Americano”, pero no todos lo logran.