Unifin sufre rebaja de nota de Fitch arrastrada por los problemas de su ramo

La mayor arrendadora independiente del país, Unifín, recibió una baja de calificación crediticia por parte de la agencia Fitch Ratings, como parte de una evaluación que toma en cuenta los problemas que enfrentan las financieras no bancarias locales, vencimientos próximos y una rentabilidad que al menos al cuarto trimestre de 2021 aún estaba por debajo de los niveles previos a la pandemia de covid-19.

La calificadora estadounidense bajó la nota de largo plazo en escala global de la compañía de ‘BB’ a ‘BB-’, o del segundo al tercer escalón dentro del bloque de activos especulativos, dio a conocer en un reporte.

Además, la calificación de la financiera fue puesta en observación negativa, lo que representa que la calificadora neoyorquina ve más probable una nueva degradación que una mejora de calificación.

“Las calificaciones de Unifin reflejan con alta importancia su evaluación de fondeo, liquidez y cobertura, cuestionada por su reducido acceso a los mercados internacionales, de los cuales la empresa obtiene el 58.4% del fondeo total”, escribió la evaluadora de riesgo en el reporte.

La nota para el perfil comercial de la compañía cayó un escalón, debido a la debilidad de financiamiento internacional derivada de la menor confianza y mayor aversión al riesgo sobre instituciones financieras no bancarias mexicanas.


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Aunque Fitch no las mencionó, probablemente se refiera a la situación de AlphaCredit y Crédito Real, sociedades financieras de objeto múltiple que han entrado en reestructura financiera, la primera por errores contables que deterioraron sus activos y la segunda por liquidez insuficiente para saldar sus obligaciones financieras.

Por otro lado, la arrendadora ha mantenido su rentabilidad los últimos dos años debajo de su promedio previo a la pandemia, por lo que Fitch recortó la evaluación de rentabilidad de la empresa.

A ello se suma un ajuste a la baja en la evaluación de financiamiento, liquidez y cobertura de Unifin, ya que entre los vencimientos de corto plazo la compañía enfrenta un bono de 200 millones de dólares sin que aún se haya refinanciado y durante los próximos 12 meses, los vencimientos significan 25.5% del fondeo total de la firma, calculó Fitch.

Unifin ya negocia distintas líneas de financiamiento y podría recurrir a otras ya contratadas que le permitirían enfrentar sus vencimientos, no obstante, “la mayoría de las opciones dependen en gran medida del sentimiento del mercado y otras aún están en proceso de negociación”, advirtió la evaluadora crediticia.

En ese entorno y tras el recorte de la calificación, la empresa destacó su comunicación con dueños y transparencia para evitar una situación compleja.

“Ante la situación volátil que enfrentan algunos participantes del sector no bancario financiero, para Unifin ha sido prioridad la comunicación transparente y continua con nuestros principales stakeholder”, escribió en un comunicado Sergio Camacho, director general de Unifin.

La compañía ya recibió un recorte de calificación global de largo plazo el mes pasado por parte de S&P Global Ratings, otra de las principales agencias crediticias globales, quedando para esta en el cuarto escalón especulativo.

S&P señaló una debilidad en la flexibilidad de su fondeo de la empresa, algo que concierne de forma generalizada a las financieras no bancarias mexicanas a raíz de la caída en la confianza de los inversionistas en el sector.

“En nuestra opinión, los riesgos internacionales, regionales y sectoriales en curso seguirán presionando las fuentes de fondeo y la flexibilidad financiera de Unifin en los próximos meses”, dijo la evaluadora de riesgo hace casi un mes.

Unifin obtuvo en febrero tres mil millones de pesos (145 millones de dólares) con la venta de bonos de corto plazo, recursos con los que probablemente busca mejorar su perfil.

En cuanto a sus pasivos financieros totales, finalizaron 2021 en 76 mil 223 millones de pesos (tres mil 800 millones de dólares), que eran casi seis veces del tamaño que su capital contable.