Edgar Abraham Mereles Flores
En el mundo de la caza y la pesca deportiva existe la veda, la cual tiene el propósito de detener y/o posponer el periodo para poder recolectar los animales con el fin de protegerlos en su época de apareamiento; en términos legales, es un delito infringir esta veda y se sanciona dependiendo las normativas. Pero las vedas no sólo se extienden al ámbito animal; como sociedad democrática y de libre elección, existe un periodo Inter elecciones llamado “veda electoral” la cual, a pesar de que muchos la consideran absurda y sin sentido fijo, sí es funcional, ya que al entrar en vigor sirve para proteger la democracia y el pensamiento individual sobre las elecciones venideras; cabe recalcar que esta veda se extiende a todo Partido Político y servidor público. Pero ¿Cómo afecta el hecho de que ésta sea ignorada e incluso remodelada de forma parcial o total para un fin que solo afecta a unos cuantos?
Pues simple, haciendo referencia a la cacería, cuando se captura o mata a un animal protegido por una veda, no solo se afecta al individuo, afectamos a toda la comunión y reproducción de la especie; esto mismo pasa con nosotros como animales humanos, únicamente que, en vez de nuestras vidas o especie, lo que se ve afectado es nuestro criterio, al ver continuamente propaganda solo a favor de un individuo y escuchar o leer comentarios haciendo mención a él mismo o, en todo caso, insinuando que el negar una propaganda es atacar a este ser con menciones del tipo: “Participen en lo que me prohibieron hablar”, lo que sucede es que, como seres sociales se nos va generando una falsa idea de ataques hacia las entidades políticas que incumplen la veda.
Con el continuar de dichos comentarios y acciones provenientes de los Partidos, al ser participantes activos de la democracia se nos va nublando la visión de un proceso justo y democrático en su totalidad. Y justo como con los animales, terminamos afectando todo lo que nos rodea, y en tales circunstancias, si no somos conocedores de las leyes electorales, terminamos siendo cazados por estos depredadores políticos.
