Después de la resolución del Parlamento Europeo, el Gobierno mexicano dio respuesta en una carta a todos los diputados que forman parte de este.
“Basta de corrupción, de mentiras y de hipocresías”, comienza el comunicado.
“Es lamentable que se sumen como borregos a la estrategia reaccionaria y golpista del grupo corrupto que se opone a la Cuarta Transformación, impulsada por millones de mexicanos para enfrentar la monstruosa desigualdad y la violencia heredada por la política económica neoliberal que durante 36 años se impuso en nuestro país”, continúa.
La respuesta del Gobierno de nuestro país sigue explicándoles a los diputados que “México ha dejado de ser tierra de conquista”, al igual que en nuestro país no se reprime a nadie y que se respeta la libertad de expresión y el trabajo de los comunicadores.
“El Estado no viola los derechos humanos como sucedía en gobiernos anteriores, cuando ustedes, por cierto, guardaron silencio cómplice”, reprocha la carta, “México es un país pacifista que ha optado por la no violencia y somos partidarios del diálogo, no de la guerra; no enviamos armas a ningún país bajo ninguna circunstancia, como ustedes lo están haciendo ahora”, asegura.
Si estuviésemos en la situación que ustedes describen en su panfleto, nuestro presidente no sería respaldado por el 66 por ciento de los ciudadanos, como lo publicó ayer la encuesta de la empresa Morning Consult que lo coloca en segundo lugar entre los principales mandatarios del mundo. Dicho sea de paso, con más aprobación que los gobernantes europeos.
El comunicado respalda y asegura que lo que anunciaron los diputados europeos no son más que falacias y si esto fuera cierto no habría manera de que el presidente Andrés Manuel López Obrador tuviera el 66 por ciento de respaldo de los ciudadanos.
“Para la próxima, infórmense y lean bien las resoluciones que les presentan antes de emitir su voto. Y no olviden que ya no somos colonia de nadie. México es un país libre, independiente y soberano”.
“Evolucionen, dejen atrás su manía injerencista disfrazada de buenas intenciones”, concluye.