En la conferencia virtual de creadores de Instagram, una conversación entre el director ejecutivo de la aplicación, Adam Mosseri, y la influencer adolescente JoJo Siwa, tomó un giro inesperado.
Siwa, conocida por usar colores de goma de mascar y lazos en el pelo, había comenzado a esbozar su larga trayectoria hacia el estrellato en las redes sociales. “¡Lo tengo todo desde los cinco años! Sé que se supone que no puedes tener Instagram hasta los 13 años. Yo sí, tenía una cuenta. Muchos niños de cinco años la tienen.…”.
Abalanzándose para interrumpir a Siwa a mitad de la frase, Mosseri dijo: “No quiero oír eso”. Se rió, pero el debate fue doloroso de ver. Un embajador de la aplicación reveló sin querer que durante mucho tiempo ha estado plagada de usuarios menores de edad, lo que supone una violación de sus propias normas.
Una encuesta que realizó la organización benéfica infantil Thorn reveló que 65 por ciento de los niños de entre nueve y doce años ha utilizado Instagram al menos una vez, y 40 por ciento lo hace al menos una vez al día. Los que lo hacen están expuestos a numerosos peligros. Según Thorn, 38 por ciento de las niñas y 36 por ciento de los niños de entre 9 y 12 años afirman que sufrieron hostigamiento; al 14 por ciento alguien en línea les ha pedido un vídeo o una foto desnudos.
En un blog, Facebook afirmó que la edad es difícil de evaluar y que la tecnología tanto de Facebook como de Instagram es un “trabajo en curso”. Para los críticos, es sorprendente que Facebook e Instagram hayan esperado hasta ahora para empezar a desarrollar su propia tecnología de verificación de la edad. Mary Aiken, profesora de ciberpsicología en la Capitol Technology University en EU, afirma que “hasta que no haya un entorno normativo que imponga las consecuencias de no desplegar una verificación de edad precisa, la situación seguirá siendo la misma”. El propio Instagram anunció sus planes de crear “Instagram Kids” para menores de 13 años, con el argumento de que los preadolescentes viven en internet pase lo que pase, así que es mejor crear un espacio seguro con controles parentales adicionales. Pero la iniciativa generó tanto rechazo que la compañía detuvo la idea mientras consultan con expertos. Lo que sigue siendo una mejora con respecto a un director que mira hacia otro lado.
