Con la abdicación de Agustín de Iturbide -el 19 de marzo de 1823- impuesta por diversos cuerpos del Ejército Nacional en el Plan de Casa Mata, el territorio que había formado el Imperio Mexicano estuvo a punto de dividirse en pequeños países, porque los jefes políticos de las diferentes provincias que lo integraban habían decidido declararse repúblicas independientes, libres y soberanas. La carencia de una constitución o pacto nacional, provocaba el temor de que apareciera una nueva tiranía, tanto así que Guadalajara, Zacatecas, Oaxaca y Puebla desconocieron al Congreso Constituyente que había nombrado como instancia encargada del poder ejecutivo a un cuerpo colegiado integrado por tres personas, conocido popularmente como Triunvirato, representado por los generales Nicolás Bravo, Guadalupe Victoria y Pedro Celestino Negrete.
Mientras que las provincias de El Bajío deliberaban su postura, Chiapas y el reino de Guatemala -mejor conocido como Capitanía General de Guatemala- se separaban de la nación a pesar de las negociaciones llevadas en la Ciudad de México a efecto de evitar la ruptura, aunque un año después Chiapas se reintegraría voluntariamente al territorio mexicano en 1824.
La única manera de evitar en ese momento la desintegración del país, apuntaba hacia la adopción del sistema federal que Yucatán- una de las provincias separatistas- impuso como condición para mantenerse unida a México. De esta manera el 7 de noviembre de 1823 sesionó el Congreso Constituyente que estaba integrado en su mayoría por miembros de lo que fue la Junta Nacional Instituyente, con ideas principalmente federalistas, liderados por Miguel Ramos Arizpe quienes lograron imponerse a los diputados centralistas encabezados por fray Servando Teresa de Mier.
Al término de los debates- el 31 de enero de 1824-fue aprobada y firmada el Acta Constitutiva de la Federación Mexicana, que era el conjunto de leyes por medio de las cuales se regiría provisionalmente el país, y en cuyo artículo sexto establecía que las partes integrantes de la República serían “Estados independientes, libres, soberanos en lo que exclusivamente toque a su administración y gobierno interior”, que adoptaba la forma de República, representativa, popular y federal un sistema copiado principalmente del modelo de los Estados Unidos de América con la diferencia que en México fueron los estados los que presionaron al centro en defensa de sus intereses.
Con la aprobación del Acta, en cuyo primer artículo dicta que: “La nación mexicana se compone de las provincias comprendidas en el territorio del virreinato llamado antes Nueva España…”, se modificó la división territorial de la joven república, quedando conformados de la forma siguiente:
- Un Distrito Federal (La Ciudad de México) como sede de los poderes de la República.
- 3 estados Internos: Estado de Interno de Occidente (conformado por las provincias de Sonora y Sinaloa), Estado Interno de Oriente (Texas, Nuevo León y Coahuila) y el Estado Interno del Norte con (Nuevo México, Chihuahua y Durango).
- 16 estados: El Partido de Colima (Segregado de Jalisco varios meses atrás), Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Nuevo Santander (posteriormente rebautizado como Tamaulipas), Oaxaca, Puebla de los Ángeles, Querétaro, San Luis Potosí, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.
- 2 Territorios: Alta y Baja California.
Cabe decir que los centralistas temían que el federalismo resultara un cambio demasiado brusco y de graves consecuencias para un país como México que había sido regido hasta entonces por un gobierno central. Veían a la República centralista como un paso lógico y necesario. Tanto en federalistas y centralistas había además una facción moderada que trataba de mediar entre ambos extremos y veían como imperativa la necesidad de unificar el país ante la amenaza separatista de algunos estados lo que finalmente lo que inclinó la decisión del Congreso Constituyente a favor de la solución que ofrecía el federalismo.
Finalmente el 1 de abril de 1824, con base en el contenido del Acta Constitutiva de la Federación Mexicana, se iniciaron los debates para proyectar la constitución que sería el pacto político de los mexicanos, la cual fue aprobada con mínimas modificaciones de fondo el 3 de octubre de 1824 y publicada el 25 del mismo mes precisamente con el título de Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos.
Este 31 de enero se cumplen 192 años de tan importante acontecimiento, en el cual participaron activamente notables jaliscienses algunos de los cuales dejaron ver su experiencia política obtenida luego de haber defendido los derechos americanos como diputados a las cortes en España.