ABBA Voyage.
¡ABBA está de vuelta! El grupo no solo se ha reformado para lanzar su primer álbum en 40 años, sino que, por primera vez desde que se disolvió en 1982, la banda pop sueca volverá a actuar en vivo.
Aprovechando la oportunidad de decir gracias por la música una vez más, en mayo de 2022 los íconos del pop lanzarán ABBA Voyage, un concierto en residencia que tendrá lugar en un estadio especialmente diseñado cerca del Parque Olímpico Queen Elizabeth de Londres. Junto a una banda de diez integrantes, el grupo interpretará canciones como ‘Mamma Mia’, ‘The Winner Takes It All’ y ‘Waterloo’, así como temas de su nuevo álbum ‘Voyage’, que obtuvo discos de platino. La peculiaridad es que en realidad no estarán allí. ABBA Voyage no es un espectáculo normal.
En esta llamada ‘experiencia de concierto digital inmersiva’, las reinas del baile Agnetha Fältskog y Anni-Frid Lyngstad, y los instrumentistas y compositores Benny Andersson y Björn Ulvaeus actuarán virtualmente a través de avatares digitales personalizados, que, por supuesto, han sido apodados como ABBATARES.
Durante más de dos años, la banda, así como un grupo de creativos y magos de la tecnología en una compañía de efectos visuales fundada por el creador de Star Wars, George Lucas, se han esforzado para crear una experiencia musical en vivo única. En lugar de que la banda aparezca como es actualmente (cada miembro tiene ahora sesenta o setenta años), ABBA Voyage los presentará como estaban en su mejor momento de los años 70. El grupo será recreado digitalmente para reflejar su apariencia cuando irrumpieron en Eurovisión e iniciaron un legado musical de 50 años que los ha visto vender 400 millones de discos.
Estos ABBATARS no son hologramas CGI, que han estado agitando el negocio de la música en vivo desde que Tupac Shakur apareció en el escenario de Coachella en 2012, unos 15 años después de su asesinato. Desde entonces, la tecnología se ha utilizado para revivir a Michael Jackson en una actuación en los Premios Billboard de 2014 y, más recientemente, en giras en las que Roy Orbison y Whitney Houston aparecieron en el escenario después de su muerte.
Estas representaciones digitales de artistas fallecidos han sido recibidas con una mezcla de asombro y repulsión. Antes de su muerte en 2016, Prince los llamó “la cosa más demoníaca imaginable… y yo no soy un demonio”. Mientras tanto, las reseñas de las giras de Orbison y Houston generaron críticas mixtas, y un crítico describió ‘An Evening with Whitney’ como ‘un macabro ingreso de efectivo’ por parte de los herederos de la difunta cantante.
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Lo que ninguno de estos hologramas ha tenido, sin embargo, es el propio artista involucrado. Eso, según el director de ABBA Voyage, Baillie Walsh, es lo que distingue a este esfuerzo. “Eso es lo maravilloso: este no es un espectáculo póstumo”, dice a través de una llamada de Zoom. Estamos trabajando con personas que están vivas y han pasado mucho tiempo siendo filmadas, para ser el corazón y el alma de este espectáculo. Ha sido una gran alegría para mí porque estás colaborando con estas cuatro personas realmente maravillosas”.
ABBA pasó cinco semanas siendo filmado por 160 cámaras para captura de movimiento mientras interpretaban las canciones que conformarán el tiempo de ejecución de 96 minutos del programa. “Eso fue con [el coreógrafo] Wayne McGregor, que tenía una coreografía muy básica para ellos”, recuerda Walsh. ‘Wayne extendió y exageró todos sus movimientos para la segunda sesión con dobles de cuerpo más jóvenes. Les dio la misma coreografía en cierto sentido, pero supongo que la hizo mucho más complicada y mucho más joven”.
En teoría, si artistas como Madonna, Paul McCartney, los Rolling Stones y Jay-Z pensaran en el futuro, podrían grabarse ahora para la posteridad, retocar sus avatares y darles vida en el escenario una vez que ya no estén con nosotros. “Creo que algunos estarán totalmente en contra de eso”, dice Hanley. “Pero habrá otros que estén dispuestos a hacerlo y que hagan el trabajo ahora para que puedan vivir mucho después de que se hayan ido”.
