De acuerdo con la asociación ARTICLE 19, cada 12 horas se registra un ataque contra periodistas o medios de comunicación.
En lo que va del año 2021 se han registrado 362 agresiones contra periodistas y medios de comunicación en México, lo que representa un ataque cada 12 horas, esto violenta de forma directa la prensa mexicana, y no es exclusivo de un solo estado.
Los estados que registraron más agresiones fueron: Ciudad de México, con 64; Tamaulipas y Quintana Roo, con 23 cada uno; Puebla, con 22; Guerrero, con 21 y Baja California, con 19.
El informe indica que las principales agresiones de las que se tiene conocimiento se trataron de intimidaciones y hostigamientos, seguido de amenazas, y por último ataques físicos y el uso ilegítimo del poder público.
Según datos de la Agencia Statista, el problema de la libertad de prensa en el país ha ido creciendo, la persecución de prensa fue mucho mayor en el sexenio pasado y a nivel mundial, México se posiciona en el lugar 143 de 180 naciones dentro de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2021, por arriba de otros países como Venezuela, Honduras y Cuba, donde la libertad de expresión es aún más castigada.
México se convirtió en el país más mortífero para este gremio, seguido de Irak y se posiciona en el triste puesto 37 de 180 dentro de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa.
Los periodistas y medios que han recibido amenazas y agresiones, son en su mayoría por parte del Estado, tan solo este 2021, fueron 134 ataques registrados, lo que representa el 37.33 % del total. Siendo el gobierno y autoridades públicas los principales agresores.
Según el informe se registraron 83 amenazas por parte de funcionarios públicos a civiles, así como 46 elementos de las fuerzas de seguridad civiles, sin embargo, estas cifras pueden variar o ser más, ya que muchas de estas no son denunciadas.
La principal causa de dichos ataques se concentró durante el periodo electoral por parte de partidos políticos hacia periodistas y medios, con un total de 56 agresiones.
“No hay que olvidar que la violencia contra la prensa perpetrada por gobernantes y aspirantes al gobierno, contraviene estándares de libertad de expresión, por un lado y por el otro incumple con las obligaciones del Estado de garantizar la prevención y la protección de la prensa”, indica la organización en su informe.
Cabe destacar que los ataques no han sido solo físicos, si no que uno de cada tres son por internet, a través de campañas de desprestigio y comunicaciones intimidatorias, así como ciberataques e intentos de acceso a sus cuentas personales.
