Por lo menos han sido siete personas las que resultaron intoxicadas durante el pasado fin de semana en el campus de la Universidad Técnica de Darmstadt, cerca de Fráncfort, en el oeste de Alemania.
Por su parte la Policía sospecha de que se trata de un ataque intencional con veneno y ha abierto una investigación por presunto intento de homicidio.
En total seis de las víctimas requirieron hospitalización, y una de ellas un hombre de 30 años permanecía ayer en estado crítico.
Se detalla que los afectados habían consumido agua o leche almacenada en una habitación de libre acceso. Todos ellos reportaron haber sufrido náuseas, mientras que algunos indicaron, además, que las puntas de sus manos y pies habían adquirido un tono azul.
Este martes, los agentes continuaban trabajando en el lugar en busca de más envases contaminados con la sustancia tóxica —hasta ahora no identificada—, la cual emite un característico olor acre.
Mientras tanto la presidenta de la institución educativa, Tanja Brühl, ha prometido ponerse personalmente en contacto con cada uno de los afectados tan pronto como sea posible y les deseó una pronta recuperación.
“Estamos conmocionados por el aparente crimen que ocurrió en nuestra universidad”, declaró Brühl este martes.
Por su parte los investigadores piden a todos los que hayan bebido de una botella adquirida en las instalaciones o que noten alguno de los mencionados síntomas que busquen ayuda médica inmediatamente.