En la cárcel de máxima seguridad conocida como “El Infiernito”, en el sur de Guatemala, presos de la pandilla Barrio 18 tomaron como rehenes a 18 guardias para exigir el traslado de otros reos a ese penal, así lo informó hoy el gobierno, donde ya hay varias unidades de la Policía Nacional Civil para brindar seguridad en el perímetro, según revelan medios locales.
El periódico Prensa Libre, citando al Sistema Penitenciario (SP), reveló que no se han reportado mayores incidentes y que actualmente no hay lesionados.
“Se mantiene el control (…) tras la retención de 18 guardias. El área perimetral (de la cárcel) se encuentra totalmente resguardada por agentes policiales”, reveló el Sistema Penitenciario en un comunicado.
Los agentes están retenidos desde la noche del miércoles. Jerónima Álvarez, vocera del Sistema Penitenciario, dijo al periódico guatemalteco que irá al lugar, nombrado oficialmente como Centro de Alta Seguridad Canadá, para establecer un diálogo junto comisiones de derechos humanos y escuchar las demandas de los reos.
Los pandilleros exigen “el traslado de algunos privados de libertad” de otras prisiones hacia esta cárcel ubicada en el departamento sureño de Escuintla, dijo a la AFP una funcionaria del área de Comunicación del SP.
En la prisión se encuentran unos 200 reos de Barrio 18, pandilla que junto a su antagónica Mara Salvatrucha se dedican a extorsionar principalmente a comerciantes y empresarios del transporte de pasajeros.