La población se encuentra a merced de la delincuencia organizada, porque el gobierno federal ha sido incapaz de asumir la posición que le toca.
• El tráfico de armas es un problema muy complejo, que se debe combatir con acciones bilaterales entre ambos países,
• Más allá de echar culpas al país vecino, la pregunta es qué está haciendo México para blindar nuestras fronteras y evitarlo.
• En 32 meses de gobierno se han registrado 96,089 homicidios dolosos, mientras que, durante 2020, 25,456 fueron realizados con armas de fuego.
Acción Nacional presentará una denuncia en la Fiscalía General de la República para que investigue el probable contubernio de autoridades aduanales y de seguridad mexicanas con el crimen organizado para la introducción de armas a México, informó el presidente nacional Marko Cortés Mendoza.
Al mismo tiempo, el diputado Felipe Fernando Macías presentará un exhorto para que se lleven a cabo las averiguaciones pertinentes.
El Presidente del PAN señaló que la demanda se realizará para que el tráfico de armas no quede impune, ya que el ingreso clandestino sobre todo de aquellas que son de alto calibre y asalto como rifles, metralletas, granadas y lanzagranadas es ocasionada por la corrupción en las aduanas y las corporaciones de seguridad.
En 32 meses de gobierno se han registrado 96,089 homicidios dolosos, mientras que, durante 2020, 25,456 fueron realizados con armas de fuego.
“Por ello, urge que el gobierno tome cartas en el asunto y retome el control de la seguridad en México. Estamos peor que nunca, con tasas de criminalidad por los cielos y la población se encuentra a merced de la delincuencia organizada, porque el gobierno federal ha sido incapaz de asumir la posición que le toca”, destacó.
Ante la demanda que presentó el gobierno mexicano contra algunas de las mayores productoras y distribuidoras de armas en Estados Unidos, al acusarlas de facilitar el tráfico ilícito, el Dirigente planteó que más allá de echar culpas al país vecino, la pregunta es qué está haciendo México para blindar nuestras fronteras y evitar la entrada de armas ilegales a nuestro país.
“Sin duda, el tráfico de armas y de drogas es un problema muy complejo, pero éste no se combate solo de un lado, debe ser a través de medidas bilaterales y políticas transversales, donde ambos países cooperen en la parte que le corresponde y no sea un estéril reparto de culpas, como le fascina hacer a este gobierno.
Asimismo, el combate de tráfico de armas debe formar parte de una estrategia integral que el gobierno ha sido incapaz de formular a nivel nacional, concluyó.