¿Qué piensa el general secretario de que su comandante en jefe viole la Constitución de manera consciente, pública y sistemática? ¿Está de acuerdo o en desacuerdo?
¿Qué piensan los generales de división en activo y en retiro? ¿Qué piensan los oficiales en activo y en retiro? ¿Están de acuerdo o en desacuerdo?
La doctrina militar plantea que el comandante en jefe es un baluarte del cumplimiento cabal de la Constitución de la República. La cumple y la hace cumplir.
En el pasado proceso electoral, el comandante en jefe, de acuerdo al INE, entre el 5 de abril y el 26 de mayo, hizo propaganda de gobierno en 29 de las 36 mañaneras. Violó la Constitución en el 80 % de las veces.
Y de acuerdo a una investigación de El Universal (02.06.21), el comandante en jefe en 40 de las 42 comparecencias mañaneras que tuvo del 5 de abril al 1 de junio violó la Constitución. El 95.2 %.
La Carta Magna establece en los artículos 41 y 134, como bien lo sabe el comandante en jefe, que el Ejecutivo tiene prohibido intervenir en las elecciones y no está permitido promocionar obras del gobierno durante el proceso electoral.
El INE a lo largo de la contienda pidió, una y otra vez, al presidente, al comandante en jefe, que respetara la Constitución y no utilizara las mañaneras, para hablar de las elecciones y promocionar obras del gobierno. Nunca hizo caso.
Desobedeció a los señalamientos de un órgano autónomo que por mandato constitucional debe garantizar la imparcialidad y equidad en la contienda electoral. El comandante en jefe no solo descalificó al INE, al que está obligado a defender, sino que se burló de él.
¿Qué pasa si un oficial de las Fuerzas Armadas viola la Constitución y lo hace de manera pública y permanente? ¿Se le deja hacer o se le llama a cuentas? ¿El comandante en jefe goza del privilegio de sin más violar la Constitución? ¿Es una prerrogativa en virtud de su cargo? ¿Es o no un delito?
El TEPJF ha resuelto que el presidente, el comandante en jefe, en diversas ocasiones violó la Constitución durante el proceso electoral por transgredir “lo establecido en los artículos 41, párrafo segundo, y 134, párrafo séptimo, de la Constitución”.
Las Fuerzas Armadas en un Estado de derecho son las garantes, en última instancia, de que la Constitución se haga valer. Ellas deben ser ejemplo de ese cumplimiento. El más obligado es su comandante en jefe.
Entiendo que el general secretario, en público, no manifieste la posición, en nombre de las Fuerzas Armadas, al comandante en jefe por violar sistemáticamente la Constitución.
El prestigio de las Fuerzas Armadas se pone en duda ante la actitud de su comandante en jefe. Espero que el general secretario, de manera privada y en nombre de todos los militares, sí lo haya manifestado su desacuerdo. Es su obligación.
Hay que impedir que el comandante en jefe siga, sin más, violando la Constitución. Su ejemplo puede cundir y eso a nadie conviene. A quien menos a las Fuerzas Armadas que juraron defender la Carta Magna.
Twitter: @RubenAguilar