Un elefante hambriento ocasionó daños materiales en el hogar de una familia en el sur de Tailandia al destrozar la pared de la cocina para acceder a los alimentos de la vivienda.
El incidente se produjo la madrugada del pasado domingo en la localidad de Hua Hin cuando los dueños del lugar se despertaron por un ruido en la cocina. Poco después, descubrieron la enorme cabeza del elefante mientras rebuscaba la despensa con su trompa a través de un gran agujero en la pared.
La familia grabó al intruso con un teléfono móvil e incluso registró el momento en el que agarró un paquete de arroz y se lo metió en la boca.
El propietario de la casa logró expulsar al elefante y este desapareció en el bosque local.
“Reparar la pared nos costará unos 50.000 bahts (1.580 dólares)”, lamentó la dueña, Rachadawan Phungprasopporn, en declaraciones a Newsflare.
No es la primera vez que el animal aparece en la ciudad. La mujer comentó que hace dos meses merodeó por la localidad, pero sin causar ningún daño.
Según datos estimados, en Tailandia hay aproximadamente 2.000 elefantes salvajes que en ocasiones ingresan a las zonas residenciales y provocan disturbios.