El alcalde de Miami Beach, Dan Gelber, declaró el estado de emergencia y estableció un toque de queda el sábado, y dijo que las multitudes que han llegado a la ciudad recientemente son «más de las que podemos manejar».
«Demasiados vienen, realmente, sin la intención de seguir las reglas y el resultado ha sido un nivel de caos y desorden que es algo más de lo que podemos soportar»
A las 8:00 p.m. se establecerá un toque de queda en el distrito de entretenimiento de la ciudad y algunas vías estarán cerradas, indicó Gelber en una conferencia de prensa el sábado. Las medidas estarán vigentes durante las próximas 72 horas, detalló.
Las calzadas hacia Miami Beach desde el continente estarán cerradas a las personas que no residen allí a partir de las 9 p.m. durante las próximas noches, señaló el alcalde.
Por la noche, «se siente como un concierto de rock, gente de pared a pared por cuadras y cuadras», le dijo Gelber a Cabrera.
El viernes por la noche, alguien disparó un arma al aire y hubo un motín, señaló.
«Han sucedido otras cosas que son igualmente desafiantes” dijo el alcalde.
La policía de Miami Beach aumentó la dotación de personal el 3 de febrero «para cubrir el fin de semana del Super Bowl, el fin de semana del President’s Day, y luego pasamos directamente a la dotación de personal para las vacaciones de primavera», explicó Ernesto Rodríguez, portavoz del Departamento de Policía de Miami Beach (MBPD, por sus siglas en inglés), en un informe esta semana.
Desde el 3 de febrero, los agentes han realizado más de 900 arrestos en la ciudad, «más de 300 de los cuales fueron por delitos graves», según el reporte. «Al menos el 50% de los arrestados residen fuera de Florida».