“Madre solo hay dos” sigue la historia de dos madres que viven un suceso que es más común en la realidad de lo que se espera: cuando sus hijas nacieron, fueron intercambiadas por una irresponsabilidad médica, llegando así a cuidar por un tiempo a hijos que no fueron suyos.
Netflix estrenó el pasado 20 de enero “Madre solo hay dos”, una nueva serie dramática de México con Ludwika Paleta y Paulina Goto como sus principales protagonistas. Luego de ganar una gran popularidad con “Jane the virgin”, la escritora Carolina Rivera llegó a la plataforma de streaming con su primer proyecto con ellos que se ha convertido en lo más visto de la semana en muchos países.
Esta primera temporada de nueve capítulos narra las aventuras de estas dos mujeres completamente diferentes entre sí, Ana que sigue varias reglas estrictas para educar a Regina, mientras que Mariana quiere que Valentina tenga una vida más relajada. Al descubrir la terrible equivocación quedan devastadas y aunque intercambian a las niñas no pueden dejar de pensar en la otra pequeña.
En una entrevista con Sensacine México, la creadora de la serie Carolina Rivera confesó que la verdadera inspiración detrás de la serie se originó en su hija Ximena Sariñana, aunque no exactamente porque le pasó lo mismo que a la protagonistas de la serie, sino por algo más personal.
Sin embargo, la verdadera inspiración de “Madre solo hay dos” se dio más por el hecho posterior a la equivocación del bebé. Según Carolina Rivera, fue el momento en el que su hija, Ximena Sariñana, se convertía en madre la inspiración que le dio el escribir la serie, cuando intercambiaba opiniones con ella sobre cómo ser madre.