Tailandia, comenzará a realizar pruebas con humanos, una vacuna contra el covid-19 el próximo mes de noviembre, que de ser exitosa, se podría distribuir el año que viene.
Tras resultados positivos con simios en mayo, dos tipos de vacunas se enviarán a San Diego, Estados Unidos, y Vancuver, Canadá, para producir 10.000 dosis para noviembre, indicó Kiat Ruxrungtham, director del centro de investigación de vacunas la Universidad de Chulalongkorn, en Bangkok, en una rueda de prensa.
La vacuna, desarrollada en colaboración con un equipo de la Universidad de Pennsylvania, en Estados Unidos, se probará en una primera fase en unas cien personas divididas en dos grupos: en primer lugar se inocularán diferentes dosis a un grupo de individuos de entre 18 y 60 años y después a otro grupo con edades comprendidas entre los 60 y los 80.
De ser positivos los resultados de la primera fase, se pasará a una segunda fase, en la que la muestra se ampliará a entre 500 y 1.000 personas.
Por el momento, el equipo de investigadores no acepta voluntarios, ya que las pruebas necesitan la aprobación de las autoridades pertinentes, pero si éstas tuvieran éxito, se prevé que la empresa BioNet Asia podría producir la vacuna a nivel masivo a partir del tercer o el cuarto trimestre de 2021.
Tailandia fue el primer país en detectar un caso de covid-19 fuera de China, epicentro de la pandemia, pero de momento logró contener la misma mediante el cierre de fronteras y el uso extensivo de mascarillas, con 3.217 casos confirmados y 58 fallecimientos.
