• Participaron magistradas y consejeros del Tribunal Superior de Justicia de la entidad.
Con motivo del Día Internacional de las Familias, el Consejo de la Judicatura del Estado de México realizó el panel virtual “La familia en tiempo de contingencia por Covid”, encabezado por el titular del Poder Judicial mexiquense, Ricardo Sodi Cuellar, en el que magistradas y consejeros reflexionaron sobre la situación y el reto de las familias durante la pandemia.
Sodi Cuellar indicó que, a través de la historia de la humanidad, la familia ha dado cuenta de una comunidad de protección y solidaridad, por lo que en estos tiempos, donde se busca y se procura esa comprensión y apego a las personas que más queremos, el PJEdomex se reunió para analizar el tema.
El también presidente del Consejo de la Judicatura apuntó que, con la modernidad, el concepto Familia ha sufrido variaciones, pero todas guardan la misma esencia que es la unión, tan es así, que su raíz latina ha permeado a los diversos idiomas.
Enrique Víctor Manuel Vega Gómez, consejero de la Judicatura fue el moderador del panel, al cual se enlazaron litigantes, juezas, jueces, magistradas, magistrados, servidores judiciales y público en general, a través de la página de Facebook del @PoderJudicialEdomex.
Vega Gómez señaló que, de acuerdo con la ONU, las familias constituyen el apoyo durante esta crisis sanitaria, momento en que se agita la economía, el estrés aumenta, lo que a menudo resulta en una violencia contra mujeres, niñas y niños. Agregó que la ONU considera que, en el seno de las familias, existe la oportunidad real de transformar el modo en que funcionan nuestras economías y sociedades, a fin de fomentar una mayor igualdad para todos.
En este sentido, el consejero de la Judicatura, Raúl Aarón Romero Ortega se refirió a los antecedentes de este Día Internacional, instituido por la ONU en 1993 y subrayó la importancia de reflexionar sobre la crisis que enfrenta la familia, en la emergencia sanitaria que se vive.
Al hablar del “Afrontamiento familiar en tiempos de COVID-19”, Blanca Colmenares Sánchez, jueza en funciones de magistrada adscrita a la Primera Sala Familiar de Texcoco, expuso que la pandemia impacta en las familias, cuyos integrantes pasan por un rol estresante externo que altera sus respuestas en lo corporal, fisiológico y de comportamiento ubicándolos en alerta, posteriormente en una fase de defensa o resistencia y de ahí al agotamiento.
En la sesión virtual, Colmenares Sánchez indicó que ante esta situación existen estrategias de Afrontamiento Individual o Familiar, para hacer frente a una situación de stress dependiendo de cada persona, de su edad, su estado de ánimo, entre otros. Consideró importante que los servidores judiciales entiendan la situación, porque su trabajo es con todos los integrantes de la familia, quienes se encuentran en un estado emocional desbordado.
La magistrada Erika Icela Vega Castillo de la Primera Sala Familiar de Tlalnepantla, abordó el tema “La Convivencia Familiar en tiempos de COVID-19”, en el cual señaló que es fundamental cuidar el entorno familiar, el tiempo y organización de los deberes para lograr una sana coexistencia entre adultos y menores. Llamó a enseñar a los hijos a expresar agradecimiento, a que las familias sean un santuario de crecimiento, para hacer de los hogares el refugio perfecto en estos tiempos de coronavirus.
Consideró que la contingencia sanitaria es un escenario que pone a prueba los recursos de la familia y la capacidad de cada uno de sus integrantes, por lo que llamó a ejercer un liderazgo con amor, donde uno o varios miembros pongan a consideración de los otros las decisiones, para hacer de este tiempo en casa una gran experiencia que no sabemos si se volverá a repetir.
Durante su participación a distancia, la magistrada María Cristina Miranda Cruz apuntó que si no existe paz en la familia no lo habrá en el mundo, por lo que los hogares deben convertirse en recintos de amor, el lugar al que acudimos todos por afecto.
Enfatizó que el PJEdomex ha creado espacios de escucha, donde es posible transmitir los sentimientos sin sentirse vulnerados y recibir ayuda, pues el diálogo es el canal privilegiado para la búsqueda de la verdad y con el ejercicio de buenas prácticas de justicia restaurativa en materia familiar, se restablecen las relaciones personales debilitadas en este núcleo.