El pasado noviembre José Ramón Enríquez, Luis de Tavira y José María de Tavira terminaron de escribir, después de muchos meses de trabajo, una obra de teatro sobre el jesuita italiano Matteo Ricci (Italia, 1552-China, 1610), que se estrena en mayo.
El italiano fue matemático, astrónomo, cartógrafo, filósofo, teólogo y un gran conocedor de la obra de Confucio (551 a.C.- 479 a.C.). En 1571 ingresó a la Compañía de Jesús en Roma. Fue discípulo del famoso matemático y astrónomo jesuita Christophorus Clavius (1538-1612).
En 1578 en Lisboa se embarcó con destino a Goa, en la India, y en 1580 fue ordenado sacerdote. En 1582 viaja a Macao, China, también territorio portugués. Ya nunca va a salir de China y regresar a Europa.
Luis de Tavira y José Maria de Tavira, padre e hijo, en compañía del jesuita Enrique González Torres y dos historiadores, viajaron a China, para conocer los lugares donde había estado el padre Ricci en sus 28 años de trabajo en ese país.
En Shangai se entrevistaron con un jesuita holandés, profesor de una de las universidades, y gran conocedor de la vida y obra de Lì Mǎdòu, el nombre que Ricci utilizó en China.
Las ciencias y algunos instrumentos técnicos fueron las llaves que le abrieron las puertas de China y le permitieron, con otros jesuitas, entrar a la Ciudad Prohibida residencia del emperador, para entonces de la dinastía Ming.
Ricci primero se instala en Zhaoqing, Cantón, dedicado al estudio del chino que llega a hablar y escribir con fluidez. En 1589 se traslada a Shaozhou, también en Cantón. Allí enseña matemáticas a intelectuales chinos, que entran por primera vez en contacto con la tradición matemática europea. A partir de 1595 radica en Nanchang, provincia de Jiangxi. Y de 1599 en adelante en Nankín.
Para redactar Matteo Ricci: Una aventura sobre la amistad de las culturas, los De Tavira viajan también a Roma para entrevistarse con el padre Federico Lombardi (1942), que fue provincial de los jesuitas en Italia y portavoz de la Santa Sede de 2006 a 2016. Es el encargado de la causa de beatificación de Ricci y uno de los grandes conocedores de su vida y trabajo.
El intelectual y misionero escribe 20 obras científicas. Y traduce al latín los cuatro libros de Confucio. Publica la primera traducción al chino de los Elementos de Euclides (I-VI), junto a su alumno Qu Rukui, y edita el primer mapa en China que incluye a Europa, África y América. En 1595 escribe su primer libro en chino (Sobre la amistad) y de 1603 es su catecismo.
Ricci vivió un intenso proceso de aculturación y adoptó, entre otras cosas, la forma de vestir de los confucionistas y realizó un extraordinario y poderoso diálogo intercultural, para adaptar el cristianismo a la realidad china.
El jesuita italiano es un extraordinario personaje, mucho se ha escrito de él, con Luis de Tavira, que también fue jesuita, he platicado sobre la complejidad de acercarse a la vida y a la obra de Ricci y plasmar esa riqueza en un texto y en una propuesta escénica. En mayo veremos el resultado.
Twitter: @RubenAguilar