Un hombre de nombre David Wayne Oliver, salió de un banco y comenzó a lanzar billetes al aire con la intención de que la gente que pasaba por el lugar los tomara. Sin embargo, este que parece un acto para compartir, tenía algo de ilegal.
Resulta que Wayne no estaba repartiendo su propio dinero pues había robado al banco sólo unos minutos antes. El acusado, un hombre de la tercera edad, residente de Colorado Springs, Estados Unidos, habría entrado armado en el establecimiento y le ordenó a uno de los cajeros que le diera dinero.
Wayne salió a la calle sin mucha prisa y comenzó a regalar el dinero tirándolo por la calle en donde pasaba hasta llegar a una cafetería cercana a la zona; los testigos afirman que el sospechoso parecía haberse sentado a esperar a la policía.
Las autoridades de justicia arribaron al lugar y detuvieron a Oliver, mientras que la gente que pasaba por la calle y vio cómo se desarrollaba la escena, prefirió reunir el dinero para ayudarle al banco a recuperarlo.