La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) expresa su más enérgica condena por los homicidios de policías estatales de Michoacán, durante una emboscada ocurrida en El Aguaje, Municipio de Aguililla, y manifiesta sus condolencias a sus familiares, así como su solidaridad al personal de la Secretaría de Seguridad Pública de esa entidad, a la sociedad de Michoacán y al Gobierno de esa entidad.
Este Organismo Constitucional Autónomo reprueba todo acto de violencia y solicita a las autoridades correspondientes otorgar medidas de protección a los familiares de esos policías, así como el pronto y efectivo esclarecimiento de los hechos para dar con los responsables y presentarlos ante la justicia, para que reciban el castigo que conforme a derecho corresponda y no haya impunidad.
La CNDH expresa su confianza en que las víctimas de estos lamentables acontecimientos podrán hacer efectivo su derecho humano de acceso a la justicia, para conocer la verdad de lo sucedido, así como también para obtener, en lo conducente, la reparación integral del daño y garantías de no repetición.
De acuerdo con información del Ejecutivo de la entidad, el convoy policial se dirigía a cumplir una orden judicial por un tema de violencia familiar, cuando fue sorprendido por un grupo de desconocidos en el tramo carretero Aguaje-Aguililla.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos observará la evolución de los acontecimientos en el ámbito de sus competencias constitucionales y dará puntual seguimiento a las investigaciones con motivo de esos lamentables crímenes.