La cadena de moda asequible Forever 21, que fuera una marca estrella entre adolescentes pero fue víctima de una expansión demasiado rápida y de cambios en los gustos de los consumidores, se declaró formalmente en bancarrota el domingo.
La firma privada, con sede en Los Ángeles, cerrará hasta 178 tiendas en Estados Unidos. La compañía mantenía 800 establecimientos en todo el mundo, incluidos más de 500 en Estados Unidos, según la documentación de quiebra.
La empresa dijo que se centraría en maximizar el valor de sus tiendas en Estados Unidos y cerrar algunos locales en el extranjero. Forever 21 tenía previsto cerrar la mayoría de sus delegaciones en Asia y Europa, aunque seguiría operando en México y América Latina.