En 2018 el número de los asesinatos dolosos por 100,000 habitantes fue de 29, según acaba de dar a conocer el INEGI. Para tener una idea de lo que esto significa en 2006, el último año del gobierno del presidente Fox, fueron nueve.
El número de los homicidios dolosos empezó a subir en el segundo año del gobierno del presidente Calderón y a partir de ese momento todos los años ha ido en aumento. La estrategia de “guerra” en contra del narcotráfico, que él adoptaba fue la causa principal de ese crecimiento.
En el gobierno del presidente Peña Nieto continuó la misma estrategia y ya sabemos los resultados. Se llegó a los más altos niveles de violencia de por lo menos los últimos 30 años e incluso más.
La estrategia del presidente López Obrador es en los hechos más allá de los discursos, que son su especialidad, la misma que el presidente Calderón y Peña Nieto, pero radicalizada.
El Ejército, ahora con uniforme de la Guardia Nacional (GN), sigue a cargo de la aplicación de la misma estrategia de los últimos 13 años en contra del narcotráfico. No ha habido ningún cambio de fondo.
Lo nuevo es que ahora el Ejército tiene una ley, que siempre pidió, para actuar como policía en todo el territorio nacional y en todos los niveles de gobierno.
El resultado de aplicar la misma estrategia es que se obtienen los mismos resultados e incluso peores. De diciembre de 2018 a junio de 2019 el número de los homicidios dolosos suman 20,032, según el SESNSP.
Lo anterior supone un crecimiento del 6 % con relación al mismo periodo del gobierno anterior cuando hubo 18,867 homicidios dolosos.
En el actual gobierno el número de los asesinatos crece mes con mes. En diciembre fueron 2,769 y en junio 3,001. Son 232 más. Cada mes se rompe el récord histórico máximo registrado por el SESNSP.
Ahora, la estrategia implementada por el Ejército-GN arroja un promedio de 2,942 asesinados al mes, 686 a la semana, 98 al día y cuatro cada hora.
Y que en 20 de los 32 estados del país haya crecido la violencia y el número de los asesinatos dolosos. En términos porcentuales donde los homicidios se han elevado más son en Nuevo León (82 %), Morelos (45 %), Hidalgo (44 %), Sonora (42 %) y Tabasco (26 %).
Las proyecciones de los especialistas señalan que de continuar las cosas como van, al cierre del 2019 el número de los asesinatos dolosos llegaría a los 34,200 que sería superior a los del 2018 considerado como el año más violento desde que se tiene registro.
En el horizonte no se ve ningún cambio en la estrategia, lo que sin duda resulta complejo e implica un conjunto de nuevas políticas, y por lo mismo lo que se puede esperar de los próximos meses es que siga creciendo el número de los asesinatos dolosos.
Twitter: @RubenAguilar