Corea del Sur es un país de los más conectados del mundo. Casi todos sus habitantes cuentan con un teléfono inteligente y tienen acceso a Internet, sin embargo, esas ventajas tienen un lado oculto.
Cifras oficiales del año pasado demuestran que más de 140.000 jóvenes eran adictos a Internet, pero otros informes señalan que esa cifra podría ser mucho mayor. Como resultado, se han abierto numerosos centros para tratar a los adolescentes que sufren este mal y ayudarlos a desconectarlos.
Las escuelas también han implementado programas especiales para evitar que los niños se vuelvan adictos desde un comienzo.
¿Qué es la adicción a Internet?
Implica que la persona no tiene control sobre lo que hace o consume hasta el punto en que le es perjudicial, esto genera un impacto negativo sobre su salud mental o física.
¿Cómo funciona un campamento de adicción a Internet?
Es un lugar donde las personas pueden asistir para recibir ayuda para lidiar con su relación insana con la red.
Allí se pueden aprender técnicas para volverse más independiente del ciber mundo y cambiar cómo se sienten sobre el tiempo que le dedican a la red.