PROMUEVEN EN COACALCO TRADICIÓN DE “DÍA DE MUERTOS”

Con la finalidad de preservar entre los coacalquenses las tradiciones mexicanas, el Gobierno de Coacalco realizó diversas actividades que miles de habitantes disfrutaron en familia sin que se reportaran incidentes; un desfile de carros alegóricos, concurso de ofrendas, recorrido de farolitos y la instalación de casas del terror.

Bajo el lema: “Coacalco es Tradición”, las autoridades municipales agradecieron a los asistentes, pues después de dos años de pandemia, se retomaron las actividades y festividades, las cuales iniciaron con un desfile de carros alegóricos con catrinas y catrines.

Por primera vez se llevó a cabo un recorrido de farolitos en el que participaron cerca de mil personas que se dieron cita en el Centro Juvenil Salesiano de Coacalco, para iluminar el camino de las almas de los difuntos de regreso a casa.

El recorrido fue sobre la calle 16 de Septiembre y hasta la explanada del Palacio Municipal.

La administración también organizó en el Auditorio Municipal un concurso de ofrendas y catrinas de cartón, en la que participaron 25 escuelas del municipio, colectivos y artesanos de la localidad; cada institución realizó su ofrenda con temáticas de las tradiciones de diferentes estados del país.

David Sánchez Isidoro, presidente municipal, reconoció a los vecinos que se sumaron a las actividades de Día de Muertos, ya que convivieron en armonía y con la finalidad de pasar un rato agradable, así como para sentirse orgullosos de sus raíces que son estandarte a nivel mundial.

De igual manera, agradeció a los servidores públicos que conforman la administración municipal, por participar en la programación y organización de las actividades, entre las que resaltan el desfile de carros alegóricos, recorrido de farolitos y la instalación de 12 Casas del Terror que fueron ambientadas con diversos escenarios para que los chicos y no tan chicos disfrutaran de una experiencia inolvidable; además de regalar dulces a las niñas y niños.

El día de muertos es una celebración mexicana en la que se honra a los difuntos y que se remonta a la época prehispánica. Ha retomado presencia alrededor del mundo; la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Tecnología (UNESCO) nombró esta festividad patrimonio inmaterial de la humanidad en 2008.