El lixiviado está afectando el agua: Verónica Martínez Miranda, investigadora UAEMéx

• Generar soluciones para los problemas ambientales es lo que se debe hacer como investigadoras e investigadores, enfatizó la académica del Instituto Interamericano de Tecnología y Ciencias del Agua (IITCA).

Con el objetivo de analizar los efectos negativos en el agua a causa del lixiviado, Verónica Martínez Miranda, investigadora del Instituto Interamericano de Tecnología y Ciencias del Agua (IITCA) de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), desarrolla la investigación “Evaluación de los métodos de gestión de residuos sólidos urbanos en el municipio de Toluca y su disposición final en un relleno sanitario regional”, proyecto que forma parte del estímulo Mujeres en la Ciencia otorgado por el Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología (COMECyT).

El lixiviado -abundó la doctora- es cuando se tienen grandes cúmulos de basura, por ejemplo, los desperdicios residenciales, es decir, toda la materia orgánica que se acumula. Cuando la materia orgánica se empieza a descomponer se genera un líquido café, el cual es toda la materia que se está degradando; por ende, las comunidades más afectadas por el lixiviado son aquellas que están cerca de los rellenos sanitarios.

El problema del lixiviado se debe a un mal manejo en los rellenos sanitarios, sobre todo aquellos ubicados en lugares abiertos, explicó la investigadora universitaria. La consecuencia es que las membranas de la tierra sean traspasadas por el lixiviado, generando que el agua y las estructuras hidráulicas tengan fuertes afectaciones, deteriorando las piezas de las estructuras y provocando sustancias nocivas para la salud.

Una solución a este problema, dijo, es ocupar los residuos orgánicos y aprovecharlos de una mejor manera, optando por separar residuos y creando compostas.

La meta de la investigación es presentar estrategias que permitan mitigar el impacto negativo que se está teniendo en el agua, aire y suelo, además de que se cuente con información específica para sustentar decisiones gubernamentales.

“Para mí ser una mujer en la ciencia es ser una profesionista que lleva el gozo de su vocación al contexto social”, indicó la investigadora. Toda investigación que se haga se debe realizar con felicidad, hacer equipo y sumarnos para hacer cambios significativos, concluyó.